Última estación: Londres

Welcome to London... where everything is expensive!


Después de Kuala Lumpur, Malasia (kuala kuala ya!), nos fuimos a Londres... la última ciudad de este viaje. Después de pasar comiendo arroz con palitos casi todos los días y estar pasados a curri y a picante... volvimos a comer más occidental, a vestir jeans (vaqueros) y... a sentir algo de frío!

El monzón en el sudeste asiático nos atacó a ratos, y nunca nos impidió hacer nuestros paseos, pero parece que sí llegó a Londres. Una de las cosas que me ha llamado la atención es que todos hablan como Harry Potter!!! (en verdad, esta talla media mala no la entenderían nuestros amigos españoles... porque para ellos Harry Potter siempre ha hablado ezpañol en sus cines).


Ya hemos estado acá en esta ciudad previamente, así que visitar el palacio de Buckingham o algo por el estilo, no nos era tan importante... así que recurrimos a una experta en londres: "la lonely-sole-planet guide" que nos llegó por correo, así que la imprimimos para llevarla en el camino.

Esta guía, aparte de sugerirnos ir de shopping a la Oxford Street a Primark (nota: igual fuimos jaja)... nos suguirió una serie de lugares interesantes... veamos el resumen:

Agarramos un bus, de esos de dos pisos muy típicos de Londres, y dimos una vuelta pasando por los clásicos highlights que te sugiere ver la lonely planet... pero como nosotros usamos la lonely-sole-planet, nos dirigimos hacia el barrio de Covent a ver las tiendecitas del mercado de (como no) Covent, y nos comimos una cookie-monster (que la guía insistió en que la comieramos) mientras uno mira los artistas callejeros haciendo su show. La verdad, el dolor de guata que me dió la galletita fue por el precio... pero hay que reconocer que nuestra galleta de naranjitas con helado de mango y chocolate estaba espectacular.


Hicimos una parada estratégica en el London Bridge para sacarnos las fotos de rigor y nos fuimos a la Oxford Street (via Picadilly Circus) a hacer un vitrineo de cosas, discos y Primark! La verdad es que Primark era barato como dijo Sole pero estaba más lleno que Falabella el 23 de diciembre, le preguntamos a una vendedora si había algo especial y nos dijo que era así todos los días...así que mejor fuimos por los discos.





Terminamos el día, entre capeando un poco las leves lluvias en Camden, una especie de Barrio Patronato pero pokemón, en otras palabras, fue como ir al Portal Lyon en Santiago, pero en gigante... calles y calles de tiendas de tatuajes y piercings, ropa alternativa, gente con pelo y vestimenta rara, discos, antigüedades, comida de carritos... insisto... EN GRANDE, una de las visitas más cool que hicimos. Eso sí, no logramos llegar a la tienda futurista con gente vestida como los supersónicos y al sex shop inmenso que sugirió nuestra guía... pero el jet lag después de 12 horas de vuelo y el cansancio, ya nos estaban dando sablazos en las piernas.


Más cosas que la guía sugiere... ir a musicales, que hay por montones... te levantas una piedra y hay para todos los gustos. Lamentablemente a estas alturas, con poco dinero y tieeeempo... quedará agendado para otra ocasión, porque no sé cuando ni como, pero volveremos.

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